La revista de la Asociación Paleontológica Alcarreña «Nautilus» es un ilusionante proyecto que empezó en el año 2004 con el propósito de divulgar temas relacionados con la Paleontología y sus profesionales. La idea era muy simple y consistía en hacernos eco de fósiles que llamaban nuestra curiosidad, de los Paleontólogos cuyo trabajo había supuesto una aportación importante a la Paleontología de nuestro país, y de los Museos que hay repartidos en nuestra geografía.
Han pasado 16 años y seguimos con el proyecto, que solo se ha visto interrumpido cuando hemos abordado un proyecto más ambicioso como es la realización de un libro. Después de la reedición de la «guía de trilobites del Ordovício Medio» el año pasado, esperamos que a lo largo de este año vuelva a aparecer el siguiente número.
Tabla de contenidos
La revista «Nautilus» que viene. ¿De qué se hablará?
Ya estamos trabajando en la que será la revista nº 10, que esperamos que aparezca durante el año 2020. El contenido no está cerrado aún, pero sí algunos artículos de los que solo puedo contaros algunos detalles:
- Habrá un artículo sobre evolución humana que tratará sobre «Los primeros humanos: posición taxonómica de Homo habilis«. Esta serie de artículos es una colaboración con una persona externa a la Asociación Nautilus (Roberto Sáez), que está siendo muy fructífera y gratificante.
- Se hablará de equinodermos concretamente sobre «los equínidos regulares del Jurásico medio marroquí». Este trabajo es una colaboración con la Asociación de Onda (Castellón) y ojalá sea el inicio de muchas más cosas.
- Se hablará nuevamente de los aptychi. Ya lo hicimos en la revista anterior y también hemos tratado el tema en este blog (ver «aptychi (mandíbulas de ammonites)). Pero esto es lo que ocurre con el conocimiento; conforme se avanza en un tema vuelven a aparecer nuevos interrogantes en el horizonte. En este caso, hemos podido observar tres casos en los que los aptychi habían fosilizado en la cámara habitación, pero en todos ellos, el ammonite era el mismo: Neolissoceras grasianum. Esto hizo que nos planteáramos nuevas preguntas: el resto de ammonites ¿no tenían aptychus? Una vez más, la Universidad de Granada nos ha dado la respuesta.
- Trataremos el tema de las falsificaciones de fósiles, que tanto puede afectarnos y veremos cómo el problema empieza a afectar a Museos e instituciones serias. Hablaremos de las falsificaciones más comunes y comentaremos algún consejo que pueda ayudarnos a la hora de detectarlas, y bibliografía que consultar.
- Hablaremos de nuevo de depredación sobre ammonites. En esta ocasión, nuestro compañero Enrique nos mostrará las roturas que ha observado y que se cree que fueron producidas por otros cefalópodos; pero la novedad es que estas ¡pueden ser de las más antiguas descritas hasta la fecha!
- Explicaremos cómo preparar una concha de ammonite (Cordubiceras sp.) para su estudio. A continuación, nuestro compañero Enrique nos presentará los componentes de esta interesante familia de ammonites en un amplio reportaje.
Y habrá más temas interesantes. Por ejemplo:
- Se hablará de moluscos bivalvos; su autor (Alejandro) está ultimando los detalles. Tratará sobre los últimos Persististrombus fósiles que aparecen en la península. Sin duda será otro interesante artículo en línea con lo que ha ido presentándonos en revistas anteriores.
- Habrá un capítulo de introducción a los corales realizado por nuestro compañero Alfredo. Será una introducción con vistas a presentarnos algunas especies fósiles en un futuro.
- Presentaremos el reptil Triásico Lariosaurus sp. hallado en Cehegín (Murcia) y que está depositado en el museo de la ciudad. Nuestro compañero Carlos nos explicará cómo fue su curioso descubrimiento.
- Hablaremos de Paleontólogos Ilustres y de Museos. En este caso habrá un amplio reportaje del Centro de Interpretación de Cabra (Córdoba) al que ya le hemos dedicado esta pequeña entrada.
- Se explicará qué es la Paleopalinología. Nuestro compañero Manuel de la Universidad de Vigo explicará los métodos para extraer el polen fósil de las rocas y cómo se preparan las muestras de laboratorio. También comentará cómo se trabaja con dichas muestras.
- Manuel, profesor de Microbiología de la Universidad Miguel Hernández de Elche nos pondrá al día sobre los últimos avances sobre evolución biológica. Esta es otra magnífica colaboración externa de la que estamos muy agradecidos.
- Y por último, relacionado con los ammonites he seguido explorando el universo de los cefalópodos actuales para identificar detalles que puedan estar relacionados con aquellos. Por ejemplo, ¿quedan cefalópodos con concha interna que tenga cámaras? Puede que sí…
Os iremos comentando alguna cosa más según vayamos avanzando.
La portada de la revista «Nautilus» nº 10
Esta es la portada que hemos seleccionado para el próximo número de la revista. Se ha escogido el fósil de un reptil del Triásico superior al que se le ha dedicado uno de los artículos, y nuestro compañero Luis Fernando ha hecho una recreación del animal en uno de los entornos que se supone que habitaban estos reptiles. La lámina muestra uno de los fósiles hallados – el más completo – junto con la recreación.
Este artículo se ha podido realizar gracias a la colaboración del Museo Arqueológico Municipal de Cehegín, que es la localidad donde aparecieron los restos y donde han quedado depositados. Se encuentran expuestos al público en una de sus salas.
Curiosidades de la revista nº 10: cómo fotografiar el interior de una concha de Spirula
Como he comentado, he seguido investigando sobre los cefalópodos actuales y me encontré con el único que aún mantiene una concha tabicada que recuerda a la de los ammonites, solo que esta es interna al cuerpo del animal. Se trata del cefalópodo Spirula spirula,
Quería seccionar una concha y fotografiar el interior así que me puse manos a la obra y compré un surtido por la WEB.
Son bastantes pequeñas, pero es que Spírula es bastante pequeño y con ella tiene suficiente para ajustar su flotación.
Mi idea original consistía en sujetar la concha con algún medio y lijarla hasta que quedara al descubierto su estructura interna que había visto por Internet.
Pensé que la plastilina funcionaría bien como material de sujección, para que no se rompiese durante la manipulación. Por tanto, compré plastilina negra para que la concha blanca resaltara.
Primer problema: la fragilidad de la concha de Spirula
La primera concha que intenté colocar en la plastilina, la aplasté. La concha de Spírula es muy delgada y se rompe con facilidad.
Lo resolví calentando ligeramente la plastilina con un secador del pelo y presionando con el pulgar sobre la concha de Spirula intentando repartir la presión uniformemente. Finalmente, la segunda concha quedó suficientemente fija.
Segundo problema: la extrema fragilidad de la concha de Spirula
Bien, ahora llegaba la hora de pulir la concha. Con una máquina rotativa empecé a aplicar fricción a baja velocidad y con las muelas de grano más fino que tenía. El resultado: ¡un desastre!
Fui destrozando conchas unas tras otras. Probaba con muelas de otro material y el resultado era el mismo o peor. Llegué a probar con una lija de madera gastada que parecía completamente lisa y nada; la concha saltaba a trozos.
La sensación que tenía era que la concha es como la cáscara de un huevo. En cuanto intentaba lijarla en perpendicular, se fracturaba en trozos grandes.
Así que cogí la muela de grano más fino que encontré y del menor diámetro posible, e intenté lijar siempre a favor de la concha, pero nunca en perpendicular y el resultado fue este:
Es imposible; la concha salta en cuanto aplicas un poco de fuerza en el sentido equivocado.Pensé que esto era lo mejor que iba a tener así que decidí parar aquí y guardarlo.
Transcurrieron semanas, meses y de vez en cuando le daba vueltas al tema en la cabeza, y un día surgió otra idea…
¿Y si hay que cambiar de método?
En vez de aplicar un método mecánico iba a intentar un ataque químico.
Tercer problema: ¿os he hablado antes de la fragilidad de la concha de Spirula?
De nuevo al ataque. Cojo mi plastilina, una de mis queridísimas conchas y empiezo de nuevo.
La coloco y en esta ocasión he diluido agua fuerte (ácido clorhídrico) en agua. Me coloco guantes de goma y gafas de protección.
Usaré un pincel de acuarelas y papel de cocina para ir retirando el líquido sobrante. Y empiezo…
Aplico pinceladas por encima de la concha y cuando el burbujeo pierde fuerza lo seco con papel. También seco lo que queda sobre la plastilina para que no disuelva la concha por la zona de contacto.
Y repito… y repito… Empiezan a aparecer agujeros en la concha; esto parece que funciona.
Sigo con el proceso hasta que los agujeros son los suficientemente grandes para poder hacer fotografías y apreciar el interior. Es hora de lavar la concha con agua abundante para parar totalmente la reacción con el ácido, pero con muuuucho cuidado, que ha costado.
Este era el resultado a primera vista:
Y aquí las fotos seleccionadas después de una sesión de fotos. Se prueban todos los ángulos de enfoque, se va cambiando la iluminación y se seleccionan las mejores fotos. El esfuerzo ha merecido la pena: el resultado es ¡espectacular!
Foto de arriba, una vsita general donde se aprecian los tabiques semiesféricos de la concha.
En la foto de abajo se buscó el encuadre para poder observar el sifón. Es el tubo que conecta todas las cámaras y mediante el cual, el animal las vacía y ajusta su flotabilidad.
Estas son las fotos que aparecieron en el artículo. Para más detalles sobre el tema, ya sabéis, revista Nautilus nº 10.
Revistas «Nautilus» anteriores
Para ver lo que hemos publicado hasta la fecha visita la página WEB de la Asociación siguiendo este enlace. Pinchando en cada una de ellas te aparecerá su índice. Además, los dos primeros números son gratuitos y están disponibles en formato pdf; puedes descargártelos.
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